El explorador estadounidense Victor Vescovo estableció un récord mundial al sumergirse a más de 10.000 metros de profundidad en la fosa de Las Marianas. Lo que no esperaba era encontrarse con desechos plásticos en lo más profundo del océano. Tal como el dijo "No fue completamente sorprendente, aunque fue decepcionante ver esta obvia contaminación humana en el punto más profundo del océano. El mar no es una gran piscina de recolección de basura, aunque parece que está siendo tratado como tal".
Este hecho demuestra una vez más, la gravedad de la situación por la que están pasando los mares y el medio ambiente en general.
Arrojar basura al mar parece una solución fácil ya que las olas la arrastran y desaparece de nuestra vista. Pues no, no desaparece, queda depositada tanto en la superficie como en la profundidad de este, causando innumerables dificultades a las especies que allí habitan. Luego aparecen noticias como estas y nos sorprenden.
El ritmo acelerado de vida, la ignorancia y el desinterés son algunos de los factores que hacen que la situación se agrave cada vez más. Debemos tomar conciencia e interiorizarnos en el tema para poder hacer desde nuestro lugar, algo para cambiar las cosas.